Mia Farrow y Audrey Hepburn se casaron de corto. ¿Te atreves tú a hacer lo mismo? Sí, no te sorprendas. Ya hace tiempo que casarse de corto dejó de ser un atrevimiento. Muchas famosas han querido casarse conjugando tradición y tendencia en piezas que juegan con la longitud, con vestidos de largo asimétrico. Hoy esa tendencia sigue viva, con muchos diseños que rescatan, textil mediante, a las divas de los años 30 y 40 como eje inspiracional. ¿Te atreves, por ejemplo, a apostar por sobrecapas de tul y tejidos vaporosos para faldas que, en la parte frontal, se acortan para dejar las piernas al descubierto?
¿Ya buscando vestido de novia? ¿Has optado ya por el tradicional vestido largo? ¿No te has planteado vestirte de corto? Hojeas revistas, buscas por páginas web, visitas multitud de tiendas…Todo para hacerse una idea de lo que te gusta y no. Pero por mucho que mires, en función de lo clásica o moderna que seas -y también de la época del año en la que te cases, puede surgir una duda a resolver: qué elijes, ¿vestido de novia largo o corto? Pues bien, en este post trataremos de ayudarte a escoger un vestido de novia hasta los pies o cuando es mejor escoger uno más corto y atrevido. ¿Nos dejas ayudarte a considerar otras opciones? Pues ahí vamos.
Casarte de largo…casarte de corto
Vale, los vestidos largos son los tradicionales, los de siempre… pero eso, por si mismo, ni le da puntos a favor, ni se los quita en contra. Simplemente es una de las dos opciones. ¿Largo o corto? El vestido largo será el elegido para casarse en una ceremonia religiosa. En este caso, está mal visto que el vestido de novia sea corto. Otra cosita a tener en cuenta, es que este tipo de vestidos (los largos) se adaptan a cualquier cuerpo y a cualquier estatura. Seas alta o baja, con un vestido largo nunca vas a equivocarte. Además, funciona en cualquier época del año, siempre que tengas en cuenta el tejido en el que esté confeccionada tu prenda
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Ahora bien, cada vez más, los vestidos cortos están ganando terreno, sobre todo en las ceremonias civiles. Dado que estas pueden celebrarse en una infinidad de sitios cómo jardines, la playa o la montaña, son mucho más prácticos y llevaderos y, por tanto, ideales para bodas en épocas más calurosas
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Eso sí, este tipo de vestidos no le queda bien a cualquiera. Te quedará mejor si eres alta. Si no lo eres, vestir un vestido corto te va hacer aún más bajita. ¡Ah! Y, sobre todo, un vestido corto, es perfecto para la fiesta que viene después de la ceremonia… pues, en ella, podrás moverte a tu antojo. Eso sí, si te decides por un vestido corto, hay algo imprescindible: no tiene que quedar más de tres dedos por encima de la rodilla. Esto no es negociable… si no quieres renunciar a esa elegancia femenina tan tuya.