Seguramente hay pocas cosas que les guste más a una celebritie que romper las normas… y no cabe duda de que una boda es la ocasión perfecta para hacerlo. ¿Cómo lo hacen? Pues optando por vestidos nupciales alejados del blanco. Cierto es que cada vez es más normal ver a novias que optan por vestir, el día de la ceremonia, por colores que no son el blanco… pero siempre suelen ser colores cercanos, claros. Sin embargo, cuando se habla de romper nos referimos a romper de verdad. O sea, de amarillo azafrán a lila pasando por tonos negros. Una audacia que dice mucho del estilo personal de la persona que lleva el vestido.
Puede pensarse que, estrellas conocidas por vestir de modo poco clásico en la vida civil, también van a optar por una vestimenta poco convencional para decir el sí quiero. Sin embargo, hasta famosas conocidas por su vestir clásico -como Reese Witherspoon y Anne Hathaway– se han apuntado a esta moda nupcial colorista.
En esto, como en casi todo, siempre hay una primera vez… un pionero o pionera. En este caso, fue Elizabeth Taylor. La bella intérprete de Cleopatra optó por un vestido de gasa amarilla para casarse -por vez primera- con Richard Burton en el año 1964.
¿Te atreves a imitar a las celebrities? Pues ya sabes: rompe las normas, atrévete… y viste para tu si quiero de púrpura, negro o amarillo.